lunes, 25 de enero de 2010

últimamente



no hago más que ver monjas corriendo.


Podría tratarse de una ilusión óptica, pero ya me ha pasado por lo menos cuatro veces en la última semana. En sitios, además, diferentes. Una de negro total corría para que no se le cerrar un semáforo en mitad de la Gran Vía, al día siguiente vi otras dos cruzando la Castellana más bien a lo bruto la verdad, y también he visto a otra de blanco persiguiendo un autobús que se le marchaba. Ah., sí. Y la última esta mañana, creo que la perseguían unos niños. Estaba en una especie de jardín con barrotes, un colegio me imagino.

Eran monjas, y cubrían todas las escalas cromáticas del blanco y negro. No eran mujeres con velo, de ésas que ya no se ve otra cosa por mi barrio. Las mías son de las monjas de toda la vida, las que uno lleva viendo desde el primer florecimiento. Las que le hacen los coros al Papa y van a las manifestaciones pro-vida.

¿Será cosa de ir al especialista? Sí, claro; pero ¿a cuál? ¿Al de las depresiones? Joder, capaz de meterme a la Paroxetina en casa otro año. Y no me importa, ya me la tengo muy vista, incluso muy oída de cuando abre la boca y hace que grita. No. De verdad que no es eso. Es por lo del levantamiento. Que me gustaría conservar las cualidades. El año pasado, con la mujer aquella rondando por la casa, acompañándome a los bares, pues no había modo ni proceso, levantamiento cero, hombre topo aún menos que cero.

Bien, descartado el puto loquero, ¿a cuál recurrir? ¿tiene que ser especialista o me arriesgo a que el de medicina general me mande al urólogo? ¿Y el oculista? A lo mejor cambiándome a las lentes progresistas ésas que tiene Martínez de Mierda… Pero creo que son carísimas. Y luego sólo te regalan un trapito para limpiarlas. No creo que compense.

¿Será acaso una señal? ¿Pero una señal de qué cosa? ¿De que se está acabando el mundo y las monjas son las primeras en detectarlo -eso de que los animales se enteran de los terremotos antes que la peña? Podría ser. O que la crisis se ha terminado y volvemos a la senda de los incrementos positivos de PIB. O que se recrudece la cuestión, y nos van a joder bien jodidos el demonio, el mundo y la carne.

Estamos en un momento raro, ¿no les parece a ustedes? Íbamos a cambiar el puto modelo del capitalismo, pero a mitad de camino ya no hacía tanta falta ponerse a mover los muebles. El muchacho morenito de la Casa Pálida nos iba a traer un nuevo mundo de colores, pero parece que el tipo anda con problemas por unas reformas que no acaba de terminar. Lo malo de meterse en obras. Ya no parece tanto el fin del mundo, ni mucho menos el principio de nada que se parezca a otra cosa… Ni puta idea, oiga. Si al menos las cabronas dejaran de correr un momentito para darme alguna pista…

Tranquilidad. Yo me paso esta tarde por el de la óptica a preguntar. Y luego ya vamos viendo…

domingo, 17 de enero de 2010

Leyes fundamentales de la tectónica de placas

Los terremotos no matan a nadie.


De eso se encargan la injusticia, la pobreza y la desidia.


Hay pobres sólo porque hay ricos.



miércoles, 13 de enero de 2010

qué putada


ya se ha marchado la nieve.



ya no puedo seguir jugando a Yuri Zhivago perdido en la estepa.
tendré que volver a la oficina.