martes, 4 de enero de 2011

Una de secretos muy gordos y aterradores

Los obispos, es de suponer, tienen más cantidad de Espíritu Santo que el resto de los tipos, vayan o no a misa. Los obispos saben cosas que no todo el mundo está preparado para saber. Conocen los mensajes de la Virgen a una docena de cuidadores de encinas, allá por los años veinte de algún siglo, en la Serranía de Outlet; saben perfectamente a qué hora se acabará el mundo.



Los obispos saben de lo que verdaderamente se cuece, la palomita les sopla cantidad de informaciones a los orejones. Solo para obispos, les dice. Luego, ellos tienen que dar la password –algo como “sin pecado concebida”, pero con más nivel de seguridad. Y si pasan el control de gestión del perfil, y si tienen los permisos para saber lo que sólo ellos pueden saber –porque sólo ellos están lo bastante preparados en Teologías Variadas y en Exegética Rítmica-, entonces reciben la “información de muy primera mano”.


Entonces quedan, se ponen sus collarones esos de ir por los polígonos, y cantan y beben vino y se ponen gorritos graciosos. En la sobremesa, cuando se quedan sin fieles alrededor –que los fieles tienen mucho peligro y no están preparados- se guiñan un ojo y se van a un rincón y se cuentan las últimas noticias de Radio Trance.



Me acaba de decir el Cardenal Ministro de la Familia del Papa, óyelo bien Ernesto, que la UNESCO que no sé qué es, pero que es una organización malísima, que sólo quiere destruir el mundo, como Kaos, pero peor, tiene un plan súper secreto para que la mitad de la población sean gayes. ¿Qué me dices, Demetrio, Obispo de Córdoba, tío salado donde los haya? Como te lo cuento, Ernesto, tú, cómo me mola tu medallón, podríamos cambiar, que el martes tengo procesión con las reliquias de Santa Sandwichera de la Torre. El caso es que ya me gustaría, Demetrio mío, pero ese mismo día tengo carrera ilegal de palios en Polvoranca. No querrás que vaya sin medallote. No, no, claro. Perdóname, Ernesto, porque he pecado. No te preocupes, Demetrio. Hay más alegría en el cielo por un obispo que se arrepiente que por cien mil gayes que se penetran los agujeros unos a otros.






Tengo varias preguntas:


1.- ¿en qué parte del plan de la UNESCO para convertir a la mitad de la población mundial en homosexual, entran decisiones como la de declarar Patrimonio de la Humanidad al Canto de la Sibila, que es un drama litúrgico en el que se anuncia la segunda venida de Jesucristo al mundo? Entiendo lo del flamenco, que están siempre cantando hasta las tantas. Incluso lo de los castellers, que eso no puede ser natural. Pero, ¿en qué está pensando la UNESCO haciendo lo de la Sibila? ¿Quiere que vaya más gente a las iglesias de Palma o de Ontinyent? ¿Porque piensan que así se hacen más gayes?


2.- ¿El Papa tiene Familia? ¿Y necesita un Ministro para manejarla? ¿Tan mal se llevan? Yo, con mi hermana y el cuñado, bueno, no es que nos matemos a besos y eso, de hecho en Nochebuena le tiré un cenicero lleno a la cabrona por decir que iba a aplicar la Ley del Tabaco en el salón de su casa, que era un local público cerrado, y hasta ahí hemos llegado. Pero ya nos hemos arreglado. No nos hablamos todavía, pero le he pagado el cenicero y la limpieza de la alfombra y el cuñado me dice que las gestiones para dejarme volver van por buen camino, que con un poco de suerte, para dentro de cuatro o cinco navidades, me dan luz verde. Pero a lo que iba, ni nos ha hecho falta Ministro, ni siquiera un juez de paz de esos que hay con contrato temporal. Pero el Papa se conoce que debe tener un quilombo de los que no se apañan en una hora. Apocalíptico más bien, me supongo. Ministro, dígale a la paloma que no se me cague más en las vestiduras talares que se me están hinchando los sagrados óleos. Hijo mío, ni via crucis ni acompañamiento a las almas del Purgatorio. Esta noche te quiero en casa antes de las once. Que no hace ni dos días que has vuelto por enésima gira africana y ya quieres estar de polígono con los amigotes. Y además, dime, ¿tú no tendrás un algo en África? Que mucho vas tú por ahí, y no hay más que islámicos y negros que follan sin permiso?



Dudas, dudas…. Es lo malo de ser de a pie. Que no pillamos una. Que no estamos preparados, vamos. Menos mal que están los muchachos del medallón para soplarnos los mensajes. Al menos mientras Radio Trance Paloma siga siendo sólo para abonados.






1 comentario:

Unknown dijo...

El Papa necesita un ministro de la familia para que no le pase como a Rouco, que le sale la sobrina Magdalena en bolas en el Interviú. Pero bueno a lo mejor el papa no tiene sobrina, o se la cuida Berlusconi.